El docente juega un papel fundamental en el desarrollo socioemocional de
sus estudiantes, ya que aquí se unen varios aspectos importantes como lo es el
cariño, la autoridad y la sabiduría. Es por esto que la información
suministrada por el maestro es muy significativa para los estudiantes.
El perfil de todo docente debe ser equilibrado en distintos ámbitos, lo
emocional, lo conductual, lo pedagógico y lo espiritual, ya que eso es lo que
define su personalidad. Por esta razón debe asistir a charlas y talleres donde
crezca de manera emocional y no solo pedagógico.
Porque debe ser una persona sensible, cariñosa y amable ante sus
estudiantes y representantes, donde sus problemas deben quedar a un lado para
dar lo mejor de sí. Es importante destacar y conversarlo con los representantes
que es un ser humano igual con los mismos problemas y limitaciones que ellos,
que pondrá lo mejor de el para llevar el proceso de aprendizaje de los niños
con las mejores estrategias que se puedan aplicar. Y que espera lo mismo de
ellos como adultos significativos en la vida de sus hijos.
El educador es un ser
multidisciplinario y no lo puede olvidar, ya que en su jornada de
trabajo debe ejercer diferentes roles como: enfermero, psicólogo, recreador,
orientador, padre o madre, según lo que requieran sus estudiantes.
Es clave que el docente sea creativo y aplique estrategias innovadoras
para educar ya que debe tomar en cuenta que todos no aprendemos de la misma
manera y que existen canales de aprendizaje, de igual forma debe ver a cada
estudiante como un ser ÚNICO E IRREPETIBLE con sus necesidades e intereses particulares.
La vocación del docente se debe basar en ser:
·
Sensible.
·
Respetuoso.
·
Promotor del amor y la solidaridad.
·
Comunicativo y facilitador de aprendizaje.
·
Expresivo, tolerante y paciente.
·
Investigador e innovador.
Un buen docente será recordado por siempre por sus estudiantes…
Recuerda…
“DEJA HUELLAS NO CICATRICEZ”
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